Friday, January 8, 2016

Intensa experiencia

Realmente a mis 34 años pensé que ya había trabajado en todo, y haberlo visto todo, sentirme capaz de los conocimientos alcanzados a través de los años. Y después de ser madre, pasar una cesárea, pasar la etapa de lactancia, botar chanchitos, dormir dos horas y llegar adaptarme a mi propio modo de ser madre. Hizo que me sintiera capacitada para ser auxiliar en Inicial. Aun estudiante de comunicaciones en octavo ciclo, madre, podre asistir a una aula de 20 niños de 3 años. No pude estar mas equivocada, a pesar que los niños fueron una gran escuela. Nunca me había sentido tan incapaz y por mas que me esforzaba, parecía insuficiente. El primer día de clases fue el mas crucial;los pequeños entraban asustados, molestos o con sueño, pero otros con rabietas queriendo agarrarse del fierro del portón para no separarse de su madre, pateando y dando cachetadas. Me quede tan sorprendida, pero el caos no permitió que lo pudiera asimilar, se necesita mucha ayuda, niños que aun no hablan, que están aprendiendo a orinar y otros que hay que adivinar y constantemente estar atento de llevarlos al baño, y aun con tantos viajes a los servicios higiénicos les ganaban las ganas. Los que lloran poco a poco vamos ganando su confianza para que día a día vayan integrándose al grupo, hasta que todos juntos cantamos mi canción favorita "Tin tin tin oye bien gracias a Dios por la lluvia ..." les llego a fascinar. Su caritas juguetonas y sonrientes me hizo olvidar los primeros días. Y los atendí como atiendo a mi propia hija y mis pequeños son los que mas me apreciaban. Otra tema del gran mundo en inicial, son las madres, que es una relación bastante complicada, que es muy difícil de que todas estén contentas. Hasta que te cambien y resulta que te adoran, pero lo cambios hay veces son oportunos. Pase aun nuevo salón de niños de 5 años mas independientes, mas conversadores, mas distraídos y algunas veces un poco mas toscos. Y los mas aplicados resaltan, algunos mas tranquilos, otros igual de inquietos propio de su edad y su gran energía. Son los que mejor me recibieron, mas desenvueltos y cariñosos con sus abrazos. Después de una gran escuela en 3 años era mas tranquilo, pero seguía extrañando a mis pequeños. En el nuevo salón los mas inquietos, son los que mas están en tu mente y memoria. Los extraño y extrañare y aprendí mucho de ellos. Especialmente porque tienen un gran corazón. 3 años azul y 5 verde fueron una gran aventura que recordare con alegría.